Conocido como el «Diamante Negro» del siglo XXI. Hablamos del Carbón de Bambú.
El ingrediente estrella de la cosmética en los últimos tiempos. No es un carbón de forma natural, sino activado, lo que significa que ha sido tratado para que se potencie su poder de extracción de toxinas a la superficie y sea más receptivo a vaciar la suciedad, como si fuera una esponja que absorbe impurezas.
El Carbón de Bambú, es un carbón de leña hecho con esta planta perenne, un material microporoso con excelentes propiedades de absorción. Para la piel es un excelente exfoliante de células muertas y estimula el crecimiento de las células dejando la piel suave y sana.
Beneficios:
- Absorbe el exceso de grasa de la piel. Ayuda a equilibrar la dermis, especialmente aquellas que son grasas o mixtas.
- Antibacteriano: al ser rico en estas propiedades, además de desinfectante, lo convierte en el aliado perfecto para combatir el acné y/o espinillas.
- Ilumina la piel: gracias a su poder purificante, elimina toda la suciedad que haya en el rostro, desintoxica y deja la piel radiante.
- Blanquea la piel: gracias a que elimina la suciedad del rostro, disminuye el tamaño de los poros. Y si los poros están limpios, se consigue un tono uniforme y una piel lisa.